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  • Foto del escritorPickers en Rabia

Frutas amargas de la Pisca canadiense. Una historia de acción directa por los derechos laborales.

Escrito por Pickers en Rabia desde territorios ocupados por el Estado fascista Canadiense.


La tarde del domingo 20 de agosto, un grupo de trabajadores de la pisca- o como somos conocidxs pickers (en inglés)- con visa y sin visa de trabajo, nos movilizamos para exigr el pago que, hasta la fecha, no ha otorgado a varixs trabajadorxs una finca con gran poder en la región del Valle de Okanagan, Canadá, en la ciudad conocida como Kelowna.


En esta región grandes empresas han construido imperios agrícolas con la siembra de cereza, manzana, durazno y uva, entre otras; sin embargo esta riqueza no sería posible sin el trabajo duro de miles de personas como nosotrxs, muchxs imigrantes que venimos a estos territorios para obtener ingresos y subsistir el resto del año.


La familia Sandhu es dueña de la mega empresa Sun City Ltd, en esta temporada, llevan más de dos semanas sin pagar a cerca de 20 trabajadores que cosechamos sus cerezas y quienes seguimos sin obtener respuesta sobre qué sucederá con el pago que ganamos con nuestro esfuerzo y labor.


Algunxs de nuestros compañerxs de trabajo comentan que les da miedo emprender una demanda legal por la falta de papeles de trabajo, pero nosotrxs sabemos que no hay que temer porque aunque no tengan papeles, las leyes canadienses no los juzgan y tenemos derecho a presionar por la vía legal para que los patrones paguen lo justo a lxs trabajadores.



Nosotros sabemos que todos los años ocurren este tipo de atropellos y que las autoridades no hacen nada para frenarlo, porque al contrario de lo que se piensa, Canadá es un país racista, clasista y su gobiernos están del lado de los intereses económicos y poco les importa la vida de las personas que no tienen la ciudadana canadiense; es el lado oscuro de Canadá que siempre ha ocultado ante los ojos del mundo.


Nos hace recordar la famosa frase que se canta en las protestas canadienses: "la policía al servicio de los ricos y de los fascistas", mientras que las violencias patronales siguen ocurriendo y aprovechándose del sector trabajador que no tiene papeles para comprobar sus actividades laborales con sus empleadores.


Durante nuestra acción, con pancartas y manta en mano, nos dirigimos al domicilio de la familia Sandhu para exigir el respeto a nuestro contrato apalabrado y que cumplimos con la pisca de la cosecha.


Los mensajes en neustros carteles alcanzan a leerse las frases de "Pay us Sandhu", "Pickers against the exploiters", "Dont steeal me", en español "Páganos Sandhu", "Piscadores en contra de los explotadores" y "No me robes".




También leímos un comunicado de solidarida en el cual explicamos que las condiciones laborales siguen siendo precarias, de riesgo, respirando pesticidas tóxicos y sin seguridad médica, y encima de todo se atreven a no pagarnos por nuestro trabajo.


Frente al domicilio ubicado al este de Kelowna, y que además está rodeado por hectáreas de monocultivos transgénicos de cereza, intentamos comunicarsnos con los empleadores para que dieran la cara, obviamente sin respuesta alguna. La acción culminó dejando nuestros carteles y la manta negra sobre su entrada.




Demandas virtuales también evidenciaron a esta familia mediante carteles con los rostros de los mismos empresarios Sandhu, advirtiendo que estos empleadores no pagan a sus trabajadores. Además hoy por la mañana amanecieron en una glorieta pública algunos de esos carteles impresos pegados cerca del domicilio de dicha familia.


Algo que llama tambien la atención, es que esta misma familia Sandhu, es dueña de una mega empresa llamada Sun City.


Ahí se contratan muchos trabajadores pero con la gran diferencia de que todos tienen número de seguro social canadiense o una visa de trabajo. Ahí, nunca hemos escuchado que no les paguen. Al contrario, todos los pagos son ordenados y fromales porque la familia Sandhu sabe que estos trabajadores tienen recursos legales que les pueden afectar.


No obstante,siguen usando la fuerza de trabajo migrante de manera informal donde además no les pagan a todxs.


Esta es una de pocas historias sobre piscadores que se atreven a levantar la voz de manera pública para evidenciar los abusos laborales y escratchar a sus autores. Las respuestas no faltaron después de la acción; ahora sí respondieron a lxs trabajadores sus mensajes pero amenazando que los denunciarían a la policía y a la migra por acosar a su familia, según los comentarios por redes y testimonios personales.


Ahora que si escarbamos con más profundidad encontraríamos que miles de experiencias cómo ésta, se quedan impunes y no salen a la luz por la corrupción policial y politica.


En la última década hubo otros casos conocidos como el de Shuking, Dhaliwhal y Smagh, grandes fincas y con tanto poder que no pagan a sus empleadxs. https://sitt.iww.org/2018/02/10/las-huertas-que-no-pagan-a-lxs-cosechadores/


¿Qué otras historias oscuras habrá detrás de estas familias con tanto poder en esta latitud de Norte América? Veamos cómo resulta está como muchas otras.





Aquí incluímos nuestro comunicado completo, pedimos a compañerxs y coelctivxs solidarixs a compartir nuestra lucha y resistencia ante el racismo y explotación en las piscas Candienses:


Comunicado frente a la ausencia de pago de nuestrxs compas de cosecha.


Lxs trabajos agrícolas, en particular el del fruit picking, es un trabajo que no se hace desde ayer. Desde siempre y por la mayoría de las veces, las personas que se dedican a esto somos personas que provenimos de los cuatros puntos del mundo y muchas veces somos migrantes, indocumentados, pobres.


De esta manera, los patrones y/o los propietarios de estas fincas se aprovechan de nuestro estado *legal o ilegal*, y aprovechar esta vulnerabilidad para enriquerserce. Hoy tenemos un ejemplo perfecto que se agrega a una larga lista negra de estos jefes explotadores. Si nos encontramos aquí es para solidarizarnos con estxs companerxs que llevan semanas esperando su pago.


¿Como es posible que en un país como Canadá que se dice tan abierto hacia los migrantes, sigan sucediendo estos atropellos a los derechos laborales? Es rabioso que tengamos que pelear para que estos parásitos de la sociedad nos paguen. Estos payasos se burlan de nosotros; viven en su castillo de oro mientras que nososotrxs como trabajadores buscamos una forma de vida digna y correcta.


Queremos expresar nuestra solidaridad y empatía hacia nuestrxs compas que siguen esperando a que les paguen. Sepan que no están solxs. Somos conscientes de que las violencias patronales son una realidad frecuente que se vive mucho en el Valle de Okanagan y debemos acabar de una vez con esto.


Por eso por lo que estamos aquí hoy para pedir que se les pague inmediatamente. No podemos esperar más, necesitamos comer, pagar nuestro alquiler, enviar dinero a nuestras familias en nuestra pais, tenemos que vivir.


Este dinero lo hemos ganado honestamente con nuestro trabajo, lo hemos sudado, es fruto de todas nuestras fuerzas. Nos hemos levantado todas las noches y aguantado el calor extremo para piscar en condiciones laborales de precariedad y riesgo, porque estamos respirando estos pesticidas de mierdas que pueden afectar nuestra salud; precariedades porque nos arriesgamos cada día en el momento en que nos subimos a las escaleras con el peligro de caer y ver comprometida nuestra temporada sin ningún tipo de cobertura médica.


La familia Sandhu, tanto como otras mafias del mismo sector agrícola, es bien sabido que no es la primera vez que incurren en estos atropellos. Por ello exigimos que dejen de ignorar las demandas de sus trabajadores y que les paguen lo que adeudan e indemnicen por el tiempo y gastos que en dos – tres semanas han tenido que hacer nuestrxs compañerxs soportando estas violencias.


Si venimos de otras latitudes para atender la demanda de cosecha y que cumplan sus obligaciones como contratadores y que les paguen lo justo por su trabajo. Entonces, Sonia, Gordie y AJ, queremos nuestro pago, contestanos cuando te llamamos. Volveremos los mas posibles hasta que nos paguen, porque ya sabemos dónde viven. Necesitamos, como comunidad de pickers, estar unidxs y organizarnos entre nosotrxs para conseguir mejores condiciones de trabajo. Debemos estar unidos para que se reconozca y se respete el gran trabajo que hacemos, ya que sin nosotrxs no se cosecharía ninguna cereza de mierda. Para empoderarnos como comunidad trabajadora y demostrar nuestra fuerza para nosotrxs mismxs y sobre todo de cara a los patrones.


NINGUNA AGRESION SIN RESPUESTA!

PICKERS EN DIGNA RABIA.





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